Blog dedicado a mi gran pasión que son los perros y en particular a los Cavalier King Charles Spaniel, una raza que descubrí por casualidad y que conforme más la conozco más me fascina.
lunes, 26 de junio de 2017
Breve historia del Cavalier King Charles Spaniel
Aunque no fue reconocida hasta 1928, esta raza tiene orígenes muy antiguos.
Durante un largo periodo fue el perro predilecto por la nobleza y actualmente es un perro admirado por su carácter y su belleza.
Su aspecto ha cambiado radicalmente con el paso del tiempo, en la medida en que, a principios del siglo XX, eran muy diferentes de los perros representados en las pinturas contemporáneas de la Corte del Rey Carlos II .
La historia del Cavalier King Charles Spaniel está muy vinculada a la de su pariente cercano, el King Charles, que fue compañero de príncipes a lo largo de los cuatro últimos siglos. Ambos pertenecen a la raza de los spaniel enanos ingleses.
Estos perros, también conocidos como toy spaniels o carpet spaniel, no presentaban ningún tipo de homogeneidad entre ellos: unos tenían el hocico más achacado que otros, unos tenían el pelo liso, otros rizado, la talla variaba, mientras unos eran medianos, otros eran muy pequeños.. Los criadores constataron que el mismo perro presentaba dos morfologías diferenciadas, por un lado estaban los King Charles Spaniel de "tipo antiguo" con el hocico alargado y el King Charles del" tipo nuevo" con el hocico bastante plano.
A principios del siglo XIX, había tal confusión con los spaniels enanos que el rey de Inglaterra, Eduardo VII, tuvo que intervenir personalmente para aclarar la situación y dar una denominación oficial al King Charles.
Gracias a la influencia del americano Roswell Eldridge que ofreció una recompensa al perro que se asemejara al que aparecía en las pinturas del siglo XVI, se comenzaron a hacer los cruces oportunos para llevar al perro a su forma antigua, el tipo nuevo de raza resultante se conoció como el Cavalier King Charles Spaniel que presentaba las siguientes características generales: cráneo casi plano entre las orejas, stop poco marcado, trufa bien desarrollada y de color negro, ojos grandes de color castaño oscuro y redondos, orejas largas con abundantes mechas, cuello de longitud media y ligeramente torneado, pies compactos y provistos de buenas almohadillas con pelo abundantes, cola proporcionada a la longitud del cuerpo y bien insertada con porte alegre, pelo largo sedoso sin rizos aunque se pueden ver ligeras ondulaciones, peso en torno a los 5,5-8 kilos y altura de 30 a 35 cms (a la cruz o los hombros).
Podemos encontrar cuatro colores en el cavalier:
Negro y fuego: Base negra con manchas castañas encima de los ojos, en las mejillas, en el interior de las orejas, en el pecho, en las patas y en la parte inferior de la cola. El color fuego es vivo.
Blenheim: Base blanco perla con manchas de color castaño bien repartidas. Las manchas castañas normalmente se separan en la cabeza dejando espacio entre las orejas.
Rubí: Unicolor castaño rojizo.
Tricolor: Negro y blanco espaciados y bien repartidos con marcas de color fuego encima de los ojos, en las mejillas, en el interior de las orejas, en las patas y en la parte inferior de la cola.
Se aconseja los cruces entre el color blenheim y tricolor, y entre negro-fuego y rubí para respetar el estándar.
Saludos y hasta la próxima!!!
Jesús
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